Hola a todos,
Perdonad si no contesto a ninguno en concreto pero si me gustaría hacer algunas apreciaciones por la lectura de vuestras intervenciones. Me ha gustado mucho lo de marxólogo, que todos habéis señalado, y Jake lo ha explicado muy bien. La principal diferencia, al menos así la veo, es la no praxis que si conlleva el sermarxista. Esta praxis no es ni más ni menos que la lucha de clases.
Su punto esencial por el que hace de su vida una entrega al mismo, es que ve que la sociedad está dividida en clases (aspecto que no considera el liberalismo, dado que parte del individuo, no de las clases o colectividades) y que esas clases eran productos de las formas de producción.
Por lo tanto, no era la propiedad, como concepto genérico, el punto de partida el punto de partida del análisis marxista, sino de que hay una clase minoritaria, la burguesía, la poseedora de los medios de producción y una clase mayoritaria desposeída, el proletariado, que no tiene más que la capacidad de trabajar, por lo que tiene que vender su fuerza de trabajo para poder subsistir.
Me gustaría incidir en este aspecto ya que Marx está muy alejado de ser un liberal salvo lo que mencioné sobre su tesis de Feuerbach. Cuando Dvi ha mencionado “La universalización de la propiedad” o el “Liberalismo que propugna el reparto propiedad”, son ideas que no tienen nada que ver con Marx ni con el marxismo. La primera de estas ideas –universalización de la propiedad- es la expresión suave del dogma liberal o neoliberal (versión actualizada del mismo), en el sentido de que la propiedad privada es un derecho básico, indiscutible e incuestionable. Esta es la base ideológica del capitalismo: la propiedad se concentra en pocas manos y se transmite por herencia a los hijos.
La segunda expresión corresponde a las actuales socialdemocracias o de los partidos socialdemócratas que no cuestionan la producción capitalista, sino que intentan corregir las grandes desigualdades que se producen a través del “reparto” de las rentas por medio de unas leyes que den lugar a unos impuestos más justos y que con los impuestos recaudados por el Estado se financien una sanidad y educación universales, junto con otros derechos comunes (vivienda, dependencia…) abandonados por la ideología neoliberal, dado que esta ya propugna la reducción del Estado al mínimo, considerando que los propios mercados pueden regularse por sí mismos.
Es por esto que preguntaba como sería el derecho natural en un estado socialista y lanzaba la cuestión sobre el derecho a la propiedad privada porque si no se aclara este punto no se podemos llegar a un mayor entendimiento de Marx. No lo rechazo pero sería ampliar o revisar la teoría marxista a la vista de sus limitaciones no leer a Marx. Y aquí enlazo con el asunto de la ética y el estado
Fue Marx el que definió el estado como violencia organizada y esto incluía la dictadura del proletariado con la salvedad que esta violencia va dirigida a una clase, a la burguesa, que es la minoritaria. En cualquier caso, con la desaparición de las clases esta violencia desaparecería. Lo que no supo ver Marx, y que muy bien habéis señalado todos, es que las relaciones de poder permanecieron en los proyectos de países socialistas y una nueva clase emergió: la vanguardia del proletariado que reproduciría muchas de las contradicciones del estado capitalista demostrado así que hay contradicciones inherentes al Estado como estructura.
La amenaza que suponían estos estados supuso el auge de la socialdemocracia europea tal como ha señalado Eich y cuyas concesiones (sanidad, educación universal, etc) vemos como se están progresivamente perdiendo sin que haya ninguna posibilidad de frenarlo. Suscribo la posición de Eich sobre lo que es el Estado y, personalmente, no considero que haya unos que sean los buenos y otros los malos, todo dependerá de la economía de violencia que aplique a sus ciudadanos.
Y con esto, buenos y malos, es decir, el asunto de la ética, concluyo mi post. No acabo de estar muy seguro del planteamiento de Germán. Quizá tenga que darle otra vuelta. Si me gustaría señalar que Marx no es un filósofo moral aunque sus tesis tengan implicaciones morales. Su tesis fundamental, la lucha del oprimido, puede parecer mesiánica pero no es así, no es de esperanza como pretendía Bloch o han querido los movimientos de izquierda cristianos pues supone una lucha violenta y no de reconciliación. Del aspecto ético se ocuparon otros filósofos marxistas ya que el plan de ruta de Marx supone un conflicto moral de principios tal como se pone de relieve su choque con el liberalismo: la legitimidad de la propiedad privada. Un burgués kantiano puede decir que si, que lo reconoce como ley universal pero un obrero comunista no.
Esta irreconciliación sitúa al comunista como alguien que recorta las libertades del otro al negarle algo que éste considera legítimo y que reconoce como un derecho universal. Para salvar esto podemos acudir a Haberma, por ejemplo, pero en cualquier caso, en mi opinión, se muestra una situación prácticamente imposible de resolver si no es mediante el ejercicio de poder, en un sentido o en otro.
Saludos